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Destinos

‘Omnicanalidad, planificación y tecnología son obligatorias’

‘Omnicanalidad, planificación y tecnología son obligatorias’

Desde casi el principio de la pandemia, las previsiones de la temporada turística “normal” en España, se han dirigido hacia el turismo de proximidad y nacional, donde la naturaleza, el relax, el descanso, etc. se vislumbran como las motivaciones turísticas principales de los ciudadanos españoles este verano.

En este sentido, el turismo rural, en su máxima amplitud, se consolida como una oferta realmente de primer orden para aliviar la situación vivida por la COVID-19 y la poca probable realidad de hacer viajes al extranjero por parte del turista español.

Para conocer más en profundidad este subsector turístico, hemos podido hablar con Gustavo Nash, propietario de El Bulín Casas Rurales.

Gustavo representa una de aquellas historias de reinvención profesional, pues es un ciudadano argentino que se estableció en España hace ya casi 20 años.

Con formación en marketing, publicidad, y materias similares, en Argentina tenía, junto con su socia y esposa, una productora de televisión con la que hicieron más de 100 documentales de Arte y Cultura, además de distintos tipos de programas de todo tipo de género.

Ya en España tocó reinventarse y desde 2009, Gustavo y su socia y esposa, se dedican al turismo rural. Desde 2015 es presidente de la Asociación de Turismo de la Sierra de Madrid, pertenece a la Mesa de Turismo de la Comunidad de Madrid, y forma parte de la junta directiva de Ciclamadrid y Galsinma (Grupo de Acción Local de la Sierra Norte de Madrid).

En El Bulín Casas Rurales gestionan 34 casas y apartamentos rurales en 10 pueblos (8 de Madrid y 2 de Segovia). Además, están construyendo otros 5 apartamentos rurales en Montejo de la Sierra, Madrid, y están en la fase previa de un complejo turístico en Buitrago de Lozoya.

¿Cómo ves la recuperación en tu sector?

Después del parón experimentado por la COVID19, veo una rápida recuperación debido a la necesidad de la gente de salir después del encierro y la imposibilidad de movilizarse muy lejos.

Los principales beneficiados serán los establecimientos más cercanos a los grandes núcleos urbanos.

Pasado este boom inicial, veo una vuelta a la normalidad con algunos matices. Intuyo que muchos de los que salieron casi disparados después del encierro, y que no eran habituales del turismo rural, se transformaran en nuevos clientes de este tipo de turismo, si logramos que la experiencia sea óptima.

Hay algunas cosas que ahora se están mencionando como el futuro y fundamentales para la rápida recuperación, pero desde mi punto de vista ya deberían haberse implementado desde hace algún tiempo.

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Me refiero, por ejemplo, a la necesidad de ser omnicanal, ya que, si ya no lo somos, vamos tarde. Y también a la utilización de la planificación y la tecnología para bajar costes, pues esto es algo en lo que ya se debería haber trabajado desde la última crisis.

En el Congreso Europeo de Turismo Rural (COETUR) de 2017 ya se plantearon estos temas como una necesidad de primera magnitud.

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¿Puedes indicarnos algunos puntos clave y ámbitos de gestión para acelerar esta recuperación?

Sin duda, hay muchos temas, ámbitos, acciones, etc que se deben poner en práctica para la recuperación del sector e intentar “avanzar” el futuro. Yo destacaría los siguientes:

  • Profesionalización del sector.
  • Si queremos avanzar, debemos dejar de lado los tópicos tradicionales. Debemos oír y ofrecer lo que pide el cliente.
  • Promoción, tanto en forma individual como desde los destinos.
  • Implementación de nuevas tecnologías.
  • Adaptación de los portales tradicionales a los reclamos de los “turistas”, en lugar de seguir oyendo sólo a los propietarios que no desean modernizarse.
  • Convencer a la administración de que el destino de interior es algo más que una muletilla que se utiliza de vez en cuando para quedar bien, y que apuesten por él.
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A nivel de tu empresa, ¿qué medidas estáis tomando para acelerar esa recuperación?

Desde El Bulín Casas Rurales seguimos apostando por la promoción del destino y la nuestra propia. En nuestro caso, desde 2014, hemos rediseñado nuestra forma de trabajo y gestión para optimizar costes y hemos apostado por ser omnicanal, además de realizar una gran inversión en comunicación digital.

También potenciaremos servicios que cada vez reclaman más los clientes:

  • Fast y Auto Checkin con lo que esto implica: Control de documentación online, cobro online y apertura de puertas a través de domótica.
  • Continuaremos potenciando la reserva online directa.
  • Servicios digitales dentro del establecimiento.
  • Una mejor comunicación de producto para que el cliente nos encuentre más fácilmente, y conozca realmente lo que esta alquilando.
  • Generando confianza en el cliente, comunicando todo de forma clara para que no haya dudas.

Una vez hayamos recuperado la “normalidad”, ¿qué cambios principales crees que se habrán producido, tanto a nivel social como empresarial?

Aunque es cierto que ahora mismo hay gente que lo está pasando mal, creo que la salida de la crisis en general será rápida.

Habrá algunos sectores que tardarán un poco más que otros en recuperarse, fundamentalmente por la dependencia del turismo exterior o del turismo de masas que habrá que ver cómo evoluciona.

Desearía que esta pausa nos haya servido para permitirnos reflexionar y analizar nuestros objetivos y cómo obtenerlos, pero temo que después de un tiempo nos olvidaremos de todo y volveremos al “todo vale” de antes.

Al fin y al cabo, seguimos siendo los mismos humanos que éramos antes de la pandemia.

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Por otro lado, las empresas que mejor paradas saldrán de esta situación serán aquellas que ya trabajaban una buena planificación y estrategia de costes.

Estas situaciones de crisis son situaciones con muchas oportunidades, pero para aprovecharlas hay que estar preparado.

Desde el punto de vista social… intuyo que tendremos problemas diversos. Dos meses de “encierro” no le sientan bien a nadie. Con el tiempo veremos cómo digerimos esta experiencia.

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