En 2023, las cookies de terceros desaparecerán, les guste o no a los hoteles.
Se trata de un cambio fundamental de una técnica de 30 años de antigüedad en la que los profesionales del marketing han confiado para rastrear a los viajeros potenciales a través de los sitios web.
La captura de datos de origen es fundamental para una estrategia sin cookies, pero los profesionales del marketing no pueden limitarse a recopilar esos datos, sino que deben activarlos adecuadamente.
Los correos electrónicos codificados, los ID de las cookies de origen y los datos históricos de las reservas son todos ellos tipos de datos de origen que funcionan en conjunto para pintar una imagen completa del viajero y su viaje.
En un mundo anónimo, las cookies son esenciales. Pero hoy en día, una parte importante del tiempo de un consumidor se pasa en un entorno conectado o «logueado».
Se conectan utilizando sus direcciones de correo electrónico, que actúan como su pasaporte digital para realizar compras en línea, como la reserva de un hotel.
Aunque las cookies pueden ser útiles en un entorno de inicio de sesión, otros enfoques de identificación, como los correos electrónicos con hash, son más precisos y están en consonancia con el deseo de consentimiento y control de los consumidores.
La clave es encontrar formas de conectar con los usuarios en esos lugares autentificados.
Un correo electrónico con hash utiliza un algoritmo para convertir un correo electrónico en una mezcla única e irreconocible de caracteres con el fin de identificar y dirigirse a los viajeros en línea.
Por ejemplo, después de aplicar el hash a «[email protected]», el algoritmo lo convertiría en una cadena de caracteres irreconocible como «d7984b9599199b83cc213f19cb2906d2».
Los correos electrónicos con hash son el nuevo identificador direccionable de un viajero, lo que permite a los profesionales del marketing conectar la actividad online y offline y comunicarse con ellos en todos los dispositivos.
El correo electrónico con hash puede recopilarse de varias maneras, pero la principal es solicitar un inicio de sesión en su sitio web o después de que el viajero complete una reserva en el sitio web del hotel.
A continuación, cuando ese viajero visite otros sitios web, los responsables de marketing pueden dirigirse a él a lo largo del recorrido del cliente utilizando su correo electrónico con hash en lugar de las cookies. Los vendedores pueden incentivar a los viajeros para que proporcionen sus correos electrónicos a través de métodos como los programas de fidelización, y luego utilizar esa información para ofrecer experiencias personalizadas.
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