Como el grupo demográfico más grande desde los boomers, los millennials están influyendo en la industria de los viajes. Según los nuevos datos publicados por el informe The American Express Future of Travel and the American Express Spending & Saving Tracker, los Millennials son más optimistas y planean viajar con más frecuencia (52,8% vs. 32,1% de los Boomers) en los próximos cinco años y gastar más en los viajes que los boomers (58% vs. 41,3%)  en el mismo periodo de tiempo.

Hay similitudes también. Los datos del estudio muestran ambas generaciones comparten un alto grado de apreciación por las interacciones humanas, con el 89% de los Millennials reconociendo que el valor de un servicio personal no puede ser reemplazado.

«Una cosa está clara, las personas, independientemente de su edad y los gastos de viaje, dan un alto valor al servicio personalizado en su experiencia de viaje», dijo Claire Bennett, vicepresidente ejecutivo de American Express Viajes.

Uno de los mitos sobre los millennials es su desprecio por los agentes de viajes. Más bien al contrario, el  92,4% de los que han utilizado un agente de viajes en los últimos cinco años afirma que mejoró su experiencia de viaje. Además, casi el 60% de los millennials están de acuerdo en que pagarían más por la experiencia de un agente.

Además, existe la suposición de que los millennials tienen diferentes necesidades de viaje que sus padres, pero en muchos casos, los datos sugieren que pueden ser más similares de lo que les gustaría admitir. De hecho, de acuerdo con American Express Travel, el 76,3% de los millennials dicen que prefieren alojarse en un hotel tradicional, casi igual a los boomers, y ambos están de acuerdo (46 por ciento) en que el aumento de la tecnología en la habitación de hotel es la tendencia más atractiva.

Hay una dicotomía, eso sí, en lo que respecta a los hábitos de planificación de viajes de los millennials. Por un lado, los datos muestran que la personalización es el factor clave:  casi el 70 por ciento de los millennials dan prioridad a la planificación de una experiencia de viaje personalizada frente a la compra de un viaje pre-envasado. Sin embargo, el 58,7% de los millennials afirman que escogerían un paquete si fuera menos costoso.