Reino Unido, que en principio había decidido mantener a España en su lista de países seguros, finalmente ha optado por reimponer las restricciones por el aumento en el número de casos durante las últimas semanas en territorio español, en una decisión que obliga a guardar una cuarentena de catorce días a los ciudadanos que lleguen de España a terreno británico.

Sin embargo, y tal y como publica Elmundo.es, el gobierno de España está negociando con Reino Unido excluir de la cuarentena a las Islas Canarias y a Baleares, dos territorios insulares fácilmente aislables con una situación epidemiológica de coronavirus mucho mejor que la británica.

Así lo ha explicado la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, antes de embarcar para iniciar un viaje oficial a Turquía. «España es un país seguro», ha resaltado, y tiene rebrotes «al igual que otros países europeos».

Fuentes diplomáticas expresaron su confianza en que los dos archipiélagos españoles puedan ser excluidos de la cuarentena decretada por el Gobierno británico en las próximas horas.

El diario también recoge que el turoperador TUI ha anunciado que suspenderá sus paquetes de vacaciones a España hasta el próximo 9 de agosto, también con excepción de las islas Canarias y Baleares, a las que sus clientes podrán desplazarse a partir del lunes.

El anuncio se produce apenas  horas después de que cancelara todos sus vuelos a la España a consecuencia de la cuarentena impuesta por el gobierno británico a los ciudadanos que lleguen desde España, tal y como ha informado el director de TUI en el Reino Unido e Irlanda, Andrew Flintham.

Por su parte, el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), ha lamentado esta decisión por parte del ejecutivo británico.

Según la asociación, exigir a los viajeros británicos que regresan de España que guarden una cuarentena durante 14 días será muy decepcionante para miles de veraneantes del Reino Unido – y es desastroso para la industria del turismo, tanto en España como en el Reino Unido.

«Aunque la salud y la seguridad de los viajeros –así como la de aquellos que trabajan en la industria de los viajes y el turismo– es primordial, esta medida será un duro golpe para aquellos viajeros que ya están en España y que ahora se verán obligados a aislarse cuando regresen a casa.

El WTTC considera que las cuarentenas no ayudan a restaurar la confianza de los consumidores en un momento en el que necesitamos animar a la gente a volver a viajar.

«Instamos a los gobiernos a considerar cierres locales en lugar de cerrar las fronteras de todo el país. Pintar un país entero con la misma brocha no beneficia a nadie. Aunque entendemos la preocupación por destinos como España con nuevos casos de COVID-19, la mayoría del país y sus islas, que son destinos de vacaciones increíblemente populares, tienen menos casos que el Reino Unido».

«Animamos al gobierno a considerar soluciones que reduzcan el impacto en los viajeros y en aquellos cuyo sustento depende de los viajes y el turismo», asegura el WTTC.