Viajar es hoy posiblemente más asequible que nunca, gracias a las aerolíneas low cost y el transporte compartido, entre muchos otros factores.

Sin embargo, cuando se trata de encontrar un lugar donde alojarse, una habitación de hotel tradicional todavía supone una de las mayores partidas en el presupuesto del viaje.

El crecimiento de la economía colaborativa ha permitido a personas que viajan con un presupuesto limitado una multitud de opciones ya sean tradicionales o a través de una plataforma como Airbnb.

Más allá de las cuestiones legales que las administraciones deben acometer para permitir una competencia justa entre distintos servicios y plataformas de alojamiento, cabe preguntarse si reservar a través de Airbnb es más barato que hacerlo en un hotel.

El sitio web alemán de reservas hoteleras HRS recientemente publicó datos sobre precios de hoteles en varias ciudades, descubriendo que Nueva York es la más cara, con un precio medio por habitación de 306 dólares por noche.

Por su parte, el sitio web AirDNA rastrea y analiza el mercado de Airbnb y, de acuerdo con sus datos, una habitación reservada a través del servicio promedia 187 dólares por noche en comparación. Eso daría a los viajeros 119 dólares extra en su bolsillo trasero para gastar en el destino.

Cruzando los datos de ambas webs, Forbes argumenta que esta tendencia se repite en la mayoría de ciudades de todo el mundo. La siguiente infografía muestra cómo se refleja esta comparativa en ocho importantes destinos turísticos.

Naturalmente, argumenta el medio económico, muchos viajeros seguirán prefiriendo la reserva en un hotel ya que, entre otras ventajas, no implica el estrés de buscar un apartamento, recoger la llave y potencialmente tener que dormir con extraños en un alojamiento anunciado en Airbnb.

Artículo original en Forbes.