La rápida propagación del coronavirus ha tenido un inmenso impacto en muchos sectores de la economía mundial, siendo el turismo uno de los más duramente afectados.
El Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) y la Organización Mundial del Turismo (OMT) están aunando fuerzas para impulsar la recuperación del sector turístico en las 38 economías en las que invierte el Banco.
Según el análisis de la OMT, todos los destinos del mundo han impuesto restricciones a los viajes como respuesta a la COVID-19, algo que no había ocurrido nunca hasta ahora.
Aunque algunos destinos están empezando a aligerar las restricciones, la crisis está aún lejos de haber pasado, y este confinamiento ha conllevado una caída ingente de las llegadas de turistas internacionales.
A la luz de estos eventos sin precedentes, el BERD y la OMT han acordado tomar medidas inmediatas para facilitar la recuperación del turismo. En estos momentos, se prevé el apoyo para diversos países, entre ellos Albania, Armenia, Croacia, Egipto, Georgia, Grecia, Jordania, el Líbano, Montenegro, Marruecos, Túnez, Turquía y Uzbekistán.
La respuesta inmediata se diseñó en torno a los tres pilares del Programa de asistencia técnica de la OMT para la recuperación del turismo. Incluye la medición del impacto de la COVID-19, planes de recuperación con incentivos para revitalizar el sector turístico, protocolos para garantizar una mayor seguridad e higiene para los turistas y empleados, marketing de medidas que puedan impulsar la demanda turística, capacitación para funcionarios de turismo, y formación para las empresas del sector turístico sobre la adopción de los nuevos protocolos. Un elemento clave es preservar el capital humano, así como adaptar y fortalecer la inclusión.
Las dos organizaciones llevan tiempo colaborando y firmaron un primer Memorando de entendimiento para la cooperación en 2015, que renovaron luego en 2019.
Esta cooperación se extiende a las alianzas existentes y toma como punto de partida el Programa de asistencia técnica para la recuperación del turismo de la crisis de la COVID-19, recientemente adoptado, que incluye tres pilares a partir de los cuales la Organización tiene previsto asistir al sector: 1) recuperación económica, 2) marketing y promoción, y 3) fortalecimiento institucional y mejora de la resiliencia.
El BERD está comprometiendo toda su actividad de 2020-2021 a ayudar a sus regiones a afrontar el impacto económico de la pandemia del coronavirus, con inversiones que se prevé que alcanzarán los 21.000 millones de euros.
El Banco trabajará con todos los sectores de la economía, incluido el del turismo y la hospitalidad, que se ha visto especialmente afectado por la crisis de la COVID-19.