«Agoda, Skyscanner y Expedia han estado en competencia desleal con las agencias de viajes y operadores turísticos turcos al no pagar ningún impuesto a pesar de que ganan ingresos vendiendo productos y servicios turcos a clientes turcos en el mercado turco», ha asegurado la principal asociación turística de Turquía.
Booking.com lleva suspendida en Turquía desde el 29 de marzo de 2017 por un fallo judicial que cita las acusaciones de competencia desleal en la demanda presentada por el TÜRSAB.
El 30 de marzo, Booking.com comenzó a dejar de vender habitaciones en Turquía a los usuarios turcos, obedeciendo la orden de bloquear el sitio web.
«Como empresa de comercio electrónico y tecnología, estamos convencidos de que contribuimos a una competencia sana en el mercado ofreciendo a los consumidores turcos una plataforma transparente y fácil para comparar y reservar alojamiento en todo el mundo», subrayó en aquel entonces la agencia online».
El presidente de TÜRSAB, Firuz Bağlıkaya, ha declarado recientemente que Booking.com puede operar en Turquía después de los procedimientos legales necesarios: «Hemos estado trabajando en un modelo de ‘suscripción corporativa’ para empresas como Booking.com, que tienen su sede en el extranjero pero que reúnen a consumidores y empresas turísticas».
«Después de que implementemos ese estatus, servicios como Booking.com comenzarán a operar de nuevo en el país», señaló el 9 de julio. De momento, la prohibición podría aplicarse al resto de webs de viajes que operan en el país.