Ryanair se encuentra en el cuarto año de su programa «Siempre Mejorando», cuyo objetivo es convertirse, literalmente, en el «Amazon de los viajes».
Dicha estrategia se fundamenta en la idea de atraer al viajero con precios realmente bajos en la compra de billetes de avión para que, posteriormente, utilice Ryanair como plataforma para comprar prácticamente todo lo demás relacionado con su viaje, desde el alojamiento hasta el alquiler de coches, sin olvidar la compra de entradas para espectáculos y actividades en su destino.
Con este objetivo, Ryanair presentó Ryanair Rooms, que cuenta ahora con un nuevo diseño e integración con Google Maps, y que obtiene su inventario a partir de cinco OTAs, lo que suma para la aerolínea un portflio de 250.000 hoteles en todo el mundo.
Kenny Jacobs, máximo responsable de Marketing de la aerolínea, ha visitado Madrid para celebrar la inauguración del Travel Labs de la compañía, cuyo objetivo es desarrollar nuevas funcionalidades «in-house» para las páginas webs y app de Ryanair ya que, en opinión de Jacobs, «es más barato hacerlo así y nos permite disponer de una tecnología propia, en lugar de utilizar herramientas de un proveedor que ya trabaja con otras empresas de viaje».
No parece sencillo que los hoteleros vean a Ryanair como un nuevo canal de distribución, pero Jacobs tiene un plan muy directo para convencerlos: «probablemente mostraremos los mismos precios que el resto de OTAs, pero sabemos que los hoteles lamentan constantemente la cuantía de las comisiones que deben pagar a las agencias online. Nosotros tenemos la intención de reducir esas comisiones a la mitad».
Del mismo modo, la compañía necesitará explicar y convencer a los viajeros de que Ryanair es, además, una web donde reservar un hotel. Esto es particularmente complicado en un contexto donde los grandes actores de la industria de los viajes tratan de cubrir todo el espectro, desde reserva de noches de hotel hasta alquiler vacacional, actividades, vuelos, etc. De momento, alguno de estos gigantes han fracasado a la hora de ir más allá de los servicios a los que los clientes están acostumbrados.
Ryanair, por su parte, cree que podrá alcanzar este objetivo a través de MyRyanair, el programa de fidelización de la compañía que no sólo permitiría a la aerolínea enviar ofertas personalizadas en función de cada perfil, sino ofrecer descuentos de hasta el 40 por ciento en vuelos para los viajeros que reserven un hotel a través de su página web.
Kenny Jacobs está convencido de que en el futuro habrá cuatro o cinco grandes actores en el sector de los viajes: «los usuarios quieren tener el poder de realizar todas las acciones relacionadas con su viaje desde una misma plataforma, y nosotros queremos ser una de esas opciones».