Priceline Group afrontará una demanda en relación con su adquisición del metabuscador Momondo. El documento fue presentado ayer en Connecticut por el bufete DiCello Levitt & Casey.
Según la demanda, doce horas después de que Tersly Investments Ltd. y Highlander Worldwide Ltd. firmaran un acuerdo para poner fin a un largo litigio entre ambas partes, Priceline anunció la adquisición de Momondo, propiedad en aquel momento de Highlander, por 550 millones de dólares.
El acuerdo entre Tersly y Highlander, sin embargo, incluía la obligación de informar sobre futuras adquisiciones, y habría dejado fuera de juego a Tersly de cara a valiosos derechos de relacionados con la adquisición.
Si Tersly hubiera tenido conocimiento de la transacción en marcha, no habría aceptado estos términos, ya que la adquisición por parte de Priceline le habría dado derecho a una compensación sustancial, según el bufete de abogados.
El día después de que Tersly firmara el acuerdo, Priceline emitió un comunicado de prensa anunciando su adquisición de Momondo/ Cheapflights.
«Esto es un fraude en su forma más pura», explica Adam Levitt, asesor jurídico de Tersly y socio de DiCello Levitt & Casey, que ha representado a empresas de capital privado y fondos de inversión contra varias de las empresas más importantes de Estados Unidos.
En su opinión, «Priceline sabía o debería haber sabido sobre la participación de Highlander con Tersly a través de la debida diligencia, por lo que Tersly tenía derechos de inversión en cualquier venta de Momondo/Cheapflights».
Levitt continua: «en lugar de revelar la transacción a Tersly, Priceline conspiró conscientemente con Highlander para negociar un acuerdo de mala fe que puso fin a los futuros derechos de inversión de Tersly, los cuales habrían sido sustanciales, dada la posición de Priceline en la industria de los viajes».