Año y medio atípico en todos los sentidos el que, paulatinamente, vamos dejando atrás. Completamente marcado por la Pandemia, fueron las restricciones a la movilidad, las medidas de seguridad y un sinfín de protocolos preventivos, los encargados de marcar la hoja de ruta de los establecimientos hoteleros y demás alojamientos turísticos que, dando palos de ciego, salvaron la temporada con mayor o menor éxito.
El Black Friday de 2020, por supuesto, también se vio salpicado por esta situación, obligando a los distintos players del sector a adaptar sus estrategias comerciales al desigual avance de la crisis sanitaria y al impredecible comportamiento de un perfil de viajero sumido en la incertidumbre.
Entonces, nos permitimos la arriesgada licencia de dar, con mucho tiento, algunos consejos. Hablábamos, sobre todo, de poner el foco sobre el mercado nacional, de no ser excesivamente restrictivos con el booking window, de flexibilizar las políticas de cancelación y de limitar las ofertas a aquella parcela del inventario que más nos interesase vender.
Con los precios por los suelos y la inseguridad por las nubes, el único modo de rascar algo pasaba por servirle al visitante todas las facilidades posibles en bandeja de plata.
Hoy podemos afirmar, con cierta esperanza, que las reglas del juego han cambiado. La campaña de vacunación ha cumplido su cometido, la Covid-19 sigue con nosotros, pero, de algún modo, bajo control, lo que nos ha permitido disfrutar de un verano y de un “veroño” más que aceptables, por encima, incluso, de las previsiones más optimistas. Por tanto, el enfoque ahora es muy diferente.
Nos enfrentamos a un nuevo Black Friday conocedores del deseo irrefrenable de viajar, por un lado, y de la necesidad de recuperar el tiempo (y el capital) perdido, por otro.
El de 2021 tiene que ser, sí o sí, el Black Friday de la recuperación de los viejos hábitos, del regreso de los mercados internacionales, de la consolidación del impulso experimentado por la venta directa, del regreso de determinados aspectos de la comercialización hotelera tradicional. Esa que permitía hacer forecast, que gozaba de un booking pace equilibrado, y en la que se vendían reservas a futuro, con ciertas garantías de seguridad.
Por eso, en esta ocasión, nuestras recomendaciones llegan en forma de Guía Gratuita, “Tírate a la piscina, pero con flotador”, y acompañadas de un sorteo de una licencia anual de Price Seeker, nuestro rate shopper, en el que pasarán a participar de forma automática todos los que descarguen la guía, porque nuestro deseo es que rentabilices al máximo esta popular cita.
El ganador o ganadora será anunciado el próximo 2 de noviembre, lo que implica que dispondrá de casi un mes, antes del Black Friday, para monitorizar sus precios y de los de 10 hoteles de la competencia en hasta 5 canales a elegir, además de muchas otras funcionalidades.
Para beneficiarse de esta promoción solo hay que acceder a https://www.paratytech.com/guia-gratuita-black-friday-2021.html y seguir los pasos que se indican. El único requisito para entrar en el sorteo es pertenecer a un hotel u otro alojamiento turístico y emplear el email oficial del mismo. ¡Mucha suerte!
Paraty Tech es una empresa de servicios tecnológicos centrada en el incremento de la venta directa de establecimientos hoteleros y empresas del sector turístico. Participamos de su estrategia comercial con el objetivo de potenciar el incremento del número de reservas a través de su página web oficial, mediante la implementación del motor de reservas, soluciones de revenue management, diseño web y marketing online.