El pasado martes, la Unión Europea dio a conocer un duro proyecto de normas dirigidas a los gigantes de la tecnología como Google, Amazon y Facebook, y otros específicos de la industria de los viajes como Booking.com, cuyo poder Bruselas ve como una amenaza a la competencia e incluso a la democracia.
Estas propuestas históricas, que llegan al mismo tiempo que Silicon Valley se enfrenta a un creciente escrutinio global, podrían cambiar radicalmente la forma en que las grandes tecnológicas hacen negocio, amenazando a algunas de las empresas más grandes del mundo con multas gigantescas o incluso prohibiciones en el mercado europeo.
La jefa de competencia de la Unión Europa, Margrethe Vestager, asegura que los proyectos de ley para regular Internet tienen como objetivo llevar «el orden al caos» y frenar a los «gatekeepers» que dominan el mercado.
«La Ley de Servicios Digitales y la Ley de Mercados Digitales crearán servicios seguros y fiables, al tiempo que protegerán la libertad de expresión», explicó Vestager en una conferencia de prensa.
La Unión Europea considera que esta legislación, que lleva tanto tiempo en el aire, hará que los gigantes de internet se enfrenten a multas de hasta el 10 por ciento de su volumen de negocio por infringir algunas de las normas de competencia más graves o incluso pueden arriesgarse a ser expulsados de su actividad en Europa.
También propone multarles con el 6 por ciento de los ingresos o prohibirles temporalmente el acceso al mercado de la unión «en caso de infracciones graves y repetidas de la ley que pongan en peligro la seguridad de los ciudadanos europeos».
La Ley de Servicios Digitales y la Ley de Mercados Digitales que la acompaña establecerán condiciones estrictas para hacer negocios en los 27 países miembros de la UE, ya que las autoridades pretenden frenar la propagación de la desinformación y los discursos de odio en internet, así como el dominio que protagonizan las principales tecnológicas.
Información original en Rappler.com.