Convertir el viaje en una experiencia que promueva la inmersión intercultural, la diversidad y la inclusión puede ser el arma secreta para hacer despegar la industria turística en “la nueva normalidad”

Desde hace ya algunos años, pero sobre todo dada la actualidad de los últimos meses ahora más que nunca, es necesario impulsar un turismo más respetuoso e inclusivo, en el que la diversidad se entienda como riqueza y que aspire a la igualdad entre todas las personas, incluyendo los viajeros pero también las comunidades.

El intercambio cultural es una forma responsable y consciente de viajar. Por ello, Women in Hospitality & Travel Tech ha tomado este tema como objeto de su último panel online.

El panel contó con la participación de expertos en varias ramas del turismo, así como la inclusión y la diversidad, de quienes aprendimos conceptos tan importantes como la identidad del destino, experiencias inmersivas, intercambio cultural a través del viaje, modelos de turismo inclusivo, y mucho más.

Panelistas:

• Alicia Fajardo – Especialista en Desarrollo Turístico, fundadora y CEO de Better Tourism www.bettertourism.es
• Mercedes Martínez Villar – Founder & CEO, DOTHEGAP
• Emilio Cuñías – Geógrafo multidisciplinar especialista en gestión de destinos y marketing turístico.
• Anna Zelmo – Interculturalist & Diversity Management Consultant, Shortlisted for #EDA19 as Inspirational Role Model

Como moderadora, el evento contó con Idoia Herrero – T&H Management Graduate y miembro destacada del BCN Chapter en WHTT.

Algunas reflexiones destacadas de nuestros panelistas:

• “Antes de comercializar cualquier tipo de experiencia turística inmersiva, tiene que haber un estudio de cuál es la identidad de ese destino: ¿quiénes somos? ¿qué valores tenemos? ¿qué es lo que nos hace únicos? Es el primer paso para que la comunidad local pueda crear una proposición de valor real y auténtica».
• “Para que la población local se involucre en experiencias turísticas inmersivas e inclusivas, deben saber cuáles son los impactos positivos y negativos. En este sentido, para iniciar este tipo de intercambios se debe hacer hincapié en modelos turísticos que generan impacto positivo, esto es, comunicar que hay alternativas al turismo tradicional».
• “ La comunidad local debe saber qué impacto positivo hay en estas experiencias de intercambio más allá de métricas económicas».
• “Cuando facilitas una experiencia de intercambio cultural en un destino, generalmente, hay un beneficio social que no podría tener en un viaje tradicional en el que no hay inmersión con la cultura local. Es determinante crear un modelo de turismo inclusivo para diferentes poderes adquisitivos. Generando dos tipos de impacto, el impacto económico indirecto (y posiblemente relacionado con negocios locales); y los beneficios directos a nivel cultural, educativo y social».
• “El turismo debe ser una experiencia creativa para el viajero (concepto introducido por Richard and Raymond, 2000). Esto quiere decir que el viajero consigue todo su potencial, participando en actividades relacionadas con el entorno teniendo en cuenta las capacidades de cada persona. Por lo que, se debe asegurar un espacio (físico y abstracto) en el que se genere la reflexión adaptada a cada persona involucrada en este intercambio».
• “Los viajeros deben tener una curiosidad por entender a la comunidad local y sus actitudes antes de juzgar. Debe haber un proceso en el que el viajero se pregunte por qué alguien actúa diferente a su marco de referencia, que observe antes de actuar».
• “Las experiencias inclusivas, inmersivas y diversas han estado hasta ahora muy relacionadas a comunidades rurales y remotas. Sin embargo, en las ciudades más turísticas, este tipo de experiencias de intercambio tienen un gran potencial».