Los esfuerzos de Google para mejorar su producto de viajes están dando sus frutos, según un reciente análisis realizado por la consultora Wells Fargo, fortaleciendo su posición frente a las OTAs y a otros servicios de búsqueda al hacer que su producto sea más atractivo para las marcas hoteleras.
En dicho informe, los analistas calificaron los viajes online como un negocio digital «maduro» y señalaron que Priceline y Expedia podrían representar la mitad de todas las reservas de hoteles online a fines de 2019.
La búsqueda de hoteles de Google, asegura el informe, está produciendo consumidores mejor informados con más opciones de reserva, es decir, logra que los consumidores ofrezcan información a Google que a su vez brinde a los anunciantes datos útiles para ofrecer precios e, idealmente, completar reservas.
Ante la posible competencia entre Google y las OTA –siempre un tema controvertido dado que las OTAs son los principales clientes de Google–, las marcas de hoteles se encuentran en un panorama de búsqueda único.
Marriott es la única marca en el Índice Digital IQ de la compañía L2 capaz de entrar en los diez principales dominios de búsqueda orgánica en Google, mientras que TripAdvisor se lleva la mayor parte de los resultados.
El informe de L2 compara sitios de marcas hoteleras con los tres principales destinos turísticos online (TripAdvisor, Expedia y Kayak) y descubre, de media, los hoteles sólo captan un 5 por ciento de tráfico online de búsqueda de viajes, un 6 por ciento de suscriptores únicos de correo electrónico y un 14 por ciento de la visibilidad de búsqueda sin la marca de Google.
Un nuevo monopolio
En este contexto, el antimonopolio se ha convertido en un término clave que domina la industria tecnológica en estos días, y Google siente particularmente esa presión. En 2017, la Unión Europea impuso una fuerte multa de más de 2.000 millones de euros contra Google por su negocio de compras.
Ahora, los reguladores es Estados Están observando de cerca sus prácticas comerciales en la industria de los viajes. Un artículo de opinión reciente en The Wall Street Journal hace un llamamiento a Google para que cambie sus prácticas presuntamente anticompetitivas.
Según Skift Research, el negocio de viajes de Google vale ya 100.ooo millones y generará 14.000 millones de dólares en ingresos este año. Priceline Group y Expedia Inc. desembolsaron más de 3.000 millones de euros en publicidad de Google en 2016.
La competencia en el negocio de viajes y alojamiento online es feroz, en una escala que sólo puede ir a más, si bien hay quienes apuntan a que Google se ha unido a las principales cadenas hoteleras para sofocar la competencia de las agencias de viajes online más pequeñas.