Ahora las empresas y los trabajadores empezamos una nueva realidad tras la pandemia y eso pueda resultar una gran oportunidad para todos nosotros. El estar parado durante estos últimos tres meses nos ha servido para reexaminar y reevaluar nuestros valores y prioridades, lo que puede ser una ventaja que al final nos guiará al éxito. Esto lo que realmente queremos, ¿verdad?
El turismo para España ha sido el sector crucial durante décadas generando empleo, riqueza y fama. Sin embargo, la crisis sanitaria puso a prueba los “cimientos” de miles de empresas turísticas, algunas han encontrado el camino digno para sobrevivir, en cambio otras eligieron defraudarnos.
¿Por qué escribo todo esto? Porque soy una de esas personas que trabajaban en el sector turístico en la recepción de un hotel de 5* en pleno centro de Madrid y donde la mayoría de los clientes eran extranjeros. Lo que sé por seguro que para ellos España tiene un inmenso encanto que es imposible de olvidar y que desean volver con nosotros una y otra vez.
El clima de España, la gente amigable y alegre, nuestra famosa gastronomía, las ciudades bien cuidadas y nuestra hermosa naturaleza, todo ello cautiva a los extranjeros, es decir, los 83,7 millones de viajeros que hemos recibido el año pasado es la prueba.
El turismo internacional obviamente va a salir adelante y ahora nuestra meta es atraer a los clientes extranjeros mediante servicios novedosos. ¿Cómo lo vamos a conseguir?
Hoy en día el cliente al elegir el hotel ya le confía su bienestar, y el hecho de aplicar las nuevas normativas sanitarias no será lo suficiente para llamar su atención y recuperar las enormes pérdidas de las ventas no realizadas.
Los hoteles de ahora en adelante pueden ser algo mucho más que establecimientos dónde pernoctan y desayunan los huéspedes, sus misiones es convertirse en expertos anfitriones.
Los que hemos trabajado de cara al público extranjero sabemos cómo les gusta sentirse valorados, queridos y agradecidos cuando les dedicamos nuestro tiempo y atención.
En estos momentos tiene un gran potencial el entretenimiento programado y continuo como el atractivo principal para los clientes. El servicio personalizado sigue siendo el producto estrella del turismo, lo que presenta un escenario maravilloso para salir de esa crisis.
El turista desconoce las practicas sanitarias post Covid-19 de los países extranjeros, y por eso, puedo decir con bastante seguridad de que si estará entretenido y a gusto le puede interesar la estancia más larga en un hotel en concreto. Además, ofreciéndole a los clientes las experiencias únicas asociadas con la cultura española, puede generar gran interés debido a que será mucho más que hacer “simple turismo”, tales como; clases de lengua castellana o de cocina mediterránea, conciertos privados, fiestas temáticas, entre otros.
Esto ayudará a los extranjeros a sumergirse en la cultura española y disfrutar al máximo su estancia en el país.
Los establecimientos hoteleros ya disponen de los recursos necesarios para cuidar de sus clientes y es oportuno ofrecer a los huéspedes realizar actividades tentadoras en el hotel, aprovechando los espacios disponibles cómo amplios salones, salas de conferencias, preciosos jardines y bonitas terrazas.
En la lucha por captar clientes nos servirá de gran ayuda que el Departamento de eventos se centrará en aproximarse a los huéspedes. Si antes este departamento se situaba en el back office, ahora es imprescindible que esté visible y fácilmente accesible. Estar cara a cara con los viajeros nos permite ofrecerles programas de ocio adaptados a sus perfiles.
En cuanto a la recepción, visto que la reestructuración laboral y digitalización de ciertos servicios es inevitable, el puesto de recepcionista puede incluir funciones de guía, que sería como un “amigo local” que orientará y asistirá a los huéspedes a diario.
Obviamente, todo lo mencionado ayudará a los hoteles a destacarse de la competencia, aumentar la ocupación y como resultado empezar a generar más ingresos para el negocio.
A pesar de que las consecuencias de la pandemia fueron devastadoras para todos nosotros, me gustaría decir a los empresarios y directivos que esperamos sus llamadas y estamos preparados para adaptarnos a los cambios necesarios, y que unidos podemos reactivar el motor del turismo internacional.
Desde 2010, Yulia ha trabajado en Los Cabos México organizando eventos a medida. En 2015 se muda a España para estudiar hostelería y turismo, y así completar sus conocimientos en la organización de eventos, los cuales no solo tengan el impacto de diversión, sino también económico para el destino y los proveedores de servicios.