Airbnb se ha plegado a las exigencias del gobierno chino y ha avisado a sus anfitriones en el país de que comenzará a compartir información con las autoridades.
En un correo electrónico enviado a los hosts y consultado por el medio PhocusWire, Airbnb explica que, a partir de hora, puede «divulgar su información a las agencias gubernamentales chinas sin previo aviso».
El correo electrónico también incluye un botón claramente visible que dirige a los hosts a una landing page donde pueden desactivar sus anuncios si no están de acuerdo con la medida.
Airbnb considera que está cumpliendo con las leyes y regulaciones locales, incluidas las leyes de privacidad y divulgación de información, y que la práctica es similar a «otras empresas de alojamiento que hacen negocios en China».
También a Phocuswire, Airbnb ha explicado que «nos comprometemos a hacer todo lo posible para mantener a nuestros anfitriones e invitados informados sobre nuestro trabajo en China y ya hemos avisado a nuestros anfitriones acerca de nuestros nuevos requisitos conforme a la ley».
La compañía se verá obligada a compartir información de los huéspedes, incluidos los pasaportes y las fechas de reserva, directamente con el gobierno.
Airbnb se había resistido adoptar una medida absolutamente habitual para los hoteles, que están obligados a informar a las autoridades sobre la información de registro de los huéspedes, en lo que se considera una herramienta fundamental en cuestiones de seguridad.